El concurso aumentó este año su premio. El espacio que conduce Eladio Lárez atrae a una gran cantidad de anunciantes, sin embargo, el premio otorgado en esta versión se queda atrás con respecto a los grandes montos de dinero que se dan en otras ediciones alrededor del mundo
Eladio Lares (foto web) |
Si hubiera concursado en Venezuela, no se habría convertido en un magnate con los 400.000 bolívares que habría recibido, porque esta cantidad de dinero solo alcanza en estos momentos para comprar un carro con precio regulado.
En el año 2000, cuando RCTV -el primer canal nacional que transmitió el popular programa de concursos- compró la franquicia, el monto que se llevaba el ganador era de 100 millones de bolívares, el equivalente a 100.000 bolívares de ahora.
La inflación para ese año fue 13,4%, de acuerdo con las cifras que se encuentran en la página web del Banco Central de Venezuela.
Según evolucionó el programa, el premio máximo aumentó. Tras 4 temporadas y más de 600 episodios, a partir de este año los ganadores recibirán 400.000 bolívares.
La edición venezolana de la franquicia británica, que ya cuenta con 68 versiones en el mundo, es una de las más prestigiosas. Otras muy respetadas son las de Estados Unidos y Australia. La India, cuyo programa se hizo aún más popular gracias a la famosa película de Danny Boyle, cuenta con siete adaptaciones diferentes.
En el blog conidayvuelta.com, los venezolanos Elena Sánchez y Gabriel Núñez publicaron un video producido por ellos mismos a finales del año pasado en el cual, en clave de humor, establecen qué se puede hacer con los premios otorgados en las diferentes versiones del concurso.
En el programa original, en Reino Unido, el participante que responda correctamente la pregunta 15 se lleva 1 millón de libras, más de 1,63 millones de dólares. De acuerdo con Núñez y Sánchez, el año pasado esa cantidad de dinero alcanzaba para comprar 63 carros Ford Fiesta 2013.
Con el millón de dólares que premian en Estados Unidos, al deducir los impuestos, se podían adquirir 35 vehículos de la misma marca. Mientras que en Chile, versión que dejó de emitirse el año pasado y cuyo premio era de 120 millones de pesos (cifra que equivale a 200.000 dólares aproximadamente), hubiera sido posible comprar 13 carros similares.
En la India, las versiones que menos otorgan dinero dan hasta 10 millones de rupias, cerca de 223.000 dólares.
La gran millonaria es la edición hindi, que premia con 70 millones de rupias, equivalentes a más de 1,5 millones de dólares. En Australia, el ganador se lleva un monto cercano a 4,5 millones de dólares estadounidenses.
En Venezuela, que registró una inflación de 56,2% el año pasado, se aumentó el premio a 400.000 bolívares para la nueva temporada del programa. Sin deducir los impuestos, el ganador puede adquirir un Ford Fiesta sincrónico por 307.874,63 bolívares, según los precios regulados publicados el pasado 7 de enero en la página web de Ford Motors de Venezuela. El premio nacional equivale a 63.492 dólares.
"El principio del programa es una ilusión: la devaluación, sumada al invento fallido del bolívar fuerte, ha hecho que ni siquiera se pueda aspirar a ser millonario de verdad con los premios (...) El nuevo premio mayor apenas alcanza para acomodar la casa, no aspirar a una nueva", escribió el periodista Luis Carlos Díaz en el portal Prodavinci.com, el año pasado.
Leonardo Bigott, gerente general de Televen, aseguró por correo electrónico: "Los premios que se otorgan en programas como ¿Quién quiere ser millonario? dependen de la inversión publicitaria que los clientes y anunciantes hagan en ellos". Es decir, el dinero que se reparte no se ajusta a un monto impuesto por la franquicia británica, sino que es determinado por la cantidad de publicidad que el formato atrae.
El ejecutivo añadió que, pese a la delicada situación, aún hay interés por pautar en el programa debido a los altos números de audiencia y a las reacciones que genera en las redes sociales. El espacio, el más visto de la televisora, el año pasado obtuvo una media de 13,2% de rating, según las mediciones de AGB.
fuente http://www.el-nacional.com/